La Diputación Provincial de Teruel ha participado esta semana en el Curso de Innovación Social en Zonas Rurales, donde se han compartido experiencias que tienen como objetivo la revitalización de la sociedad rural.
Iniciativas como la puesta en marcha de un banco de tierra en Olba o Apadrina un olivo, en Oliete, se han puesto como ejemplo en los talleres y debates sobre nuevas formas de innovación social que hagan frente a la despoblación, mejoren la calidad ambiental y aumenten los niveles de actividad económica, informa la institución en una nota de prensa.
La técnica de la Oficina de Programas Europeos de la DPT Laura Gascón ha participado en estas jornadas de formación y práctica organizadas por el Instituto Agronómico Mediterráneo de Zaragoza y el proyecto europeo SIMRA para la innovación social en las áreas rurales.
El curso ha contado con representantes de España, Reino Unido, Austria, Holanda, Bélgica, Italia o el Líbano, y se ha debatido sobre el concepto de innovación social y su influencia en los resultados económicos y ambientales de las zonas rurales.
También se ha aprendido a reconocer los distintos papeles de las comunidades y la sociedad civil en los retos a afrontar, se han conocido distintas herramientas y métodos para apoyar y evaluar los proyectos de innovación que surgen de la sociedad y se ha hablado sobre cómo el contexto político puede restringir el desarrollo de este tipo de iniciativas.
Este curso forma parte de la convocatoria sobre innovación social financiada por la Unión Europea, en este caso centrado en zonas rurales marginadas (SIMRA), y el proyecto se basa en la vinculación más efectiva de la práctica con la comunidad de investigación para permitir la integración y la fertilización cruzada del conocimiento y la comprensión.