Las empresas del sector alimentario se han movilizado para contribuir a frenar la expansión del coronavirus y ayudar al abastecimiento alimentario de los equipos al cargo con medidas de todo tipo, y que van desde el reparto de agua o pizza a médicos, policías y militares, hasta la distribución de mascarillas o la fabricación de gel.
El sector, colocado bajo el foco en la actual situación de crisis sanitaria por su papel clave para asegurar el abastecimiento de comida a la población, ha dado un paso más y decenas de compañías han anunciado planes específicos de ayuda.
Cadenas de restauración que siguen operativas a través del envío a domicilio lanzaron la iniciativa "Food4heroes" ("comida para los héroes) para llevar platos a los hospitales como señal de apoyo al personal sanitario.
La patronal que agrupa a los fabricantes de agua mineral (Aneabe) ha puesto igualmente su granito de arena con la activación de un protocolo con la Cruz Roja para garantizar el suministro de este producto tanto a centros de salud como a colectivos vulnerables.
La multinacional Unilever -dueña de marcas como Frigo, Calvé, Hellmann's, Knorr, Flora, Skip o Dove- ha anunciado la donación de más de 22.000 mascarillas a centros de salud y residencias de mayores en España, además de 10.000 botes de jabón.
En el ámbito vitivinícola, las bodegas riojanas Marqués de Atrio entregaron 10.000 mascarillas a las autoridades sanitarias gracias a sus relaciones comerciales con Asia, lo que "facilitó el envío de este material desde China".
Los productores de bebidas espirituosas, notablemente afectados por el cierre de la hostelería -su principal canal de ventas-, ya han solicitado los permisos necesarios para ponerse a fabricar gel hidroalcohólico en un momento en que la demanda se ha disparado y hay falta de existencias.