El sector agrario supera el nivel de empleo anterior a la pandemia. En 2019, 793.900 personas estaban ocupadas, mientras que en diciembre eran 840.100. El cómputo trimestral arroja un crecimiento más importante. El empleo registró a final de año un repunte del 10,3%, al contratar a 78.600 personas más.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE) en su última Encuesta de Población Activa (EPA), el cuarto trimestre también revela que el paro agrario afectaba a 161.100 personas, un 12,7% menos que hace un año, cuando había 23.400 desempleadas más. Se observa así la absorción del desempleo en el sector agrario y el aumento de la ocupación en mayor cuantía. La población activa agraria se incrementa en 34.600 personas en un año. Ya asciende a 1.001.200, un 3,6% más alta.
La reducción del paro agrario es más acusada en términos trimestrales, puesto que cayó un 17,1% (33.300 personas paradas menos). La alta temporalidad sigue siendo una de las características del sector. Ya afecta al 54,15% y se confirma que también aflora el empleo temporal. La tasa de temporalidad agraria en los últimos meses es la más acusada de la historia reciente. Entre las mujeres la temporalidad es mucho más alta. El 65% de las trabajadoras agrarias por cuenta ajena tiene contrato temporal, mientras que entre sus compañeros este porcentaje es del 51%.