La guerra en Ucrania ha cambiado de manera radical el panorama económico, hasta el punto de que, según las estimaciones del Servicio de Estudios de la Cámara de Comercio de España, restará 1,2 puntos porcentuales al crecimiento económico en 2022.
Según las previsiones hechas públicas hoy, el PIB aumentará este ejercicio un 4,3% en lugar del 5,5% calculado anteriormente.
Las razones de este menor crecimiento se explican, sobre todo, por la incidencia que la alta tasa de inflación tendrá sobre el consumo de los hogares y la inversión de las empresas. Igualmente, el sector exterior se verá afectado por el menor crecimiento de los países europeos y por la interrupción del comercio internacional con Rusia y Ucrania.
La Cámara de España estima que la inflación media este año se situará en el 6,7%, con una tasa subyacente del 3,4%.
Esta fuerte subida de los precios mermará de manera significativa la capacidad de gasto de las familias. Según los últimos datos publicados por el INE, el 61% de las clases de productos y servicios que componen la cesta de la compra se encarecieron más de un 2% en febrero, y el 21% de estas partidas elevaron su precio por encima del 5%. Por esa razón, la estimación de la tasa de crecimiento del consumo privado se rebaja a la mitad, del 4% al 2%.