El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha señalado que el Gobierno aprobará, este año, la ley contra la pérdida y el desperdicio alimentario. Se trata de una ley que contribuirá a combatir el cambio climático, ya que al tirar alimentos a la basura, también se despilfarran recursos naturales. Además, el objetivo es atajar el desperdicio en todos los eslabones de la cadena, también en los hogares.
La ley española irá en beneficio de la seguridad alimentaria y de una economía circular, sostenible, baja en carbono, eficiente en el uso de recursos y competitiva. Al desperdiciar alimentos ?ha recordado- no se tira solo comida, "estamos desperdiciando los recursos naturales empleados en obtenerla y el trabajo de todos los operadores de la cadena de suministro alimentario".
La ley estará comprometida con el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 y, en concreto, con el de reducir a la mitad el desperdicio per cápita de alimentos, incluidas las pérdidas posteriores a la cosecha.
Recuperar el valor de los alimentos (no solo económico, sino también medioambiental) será una de las estrategias de la norma, que contempla actividades de sensibilización e información dirigidas a todos los agentes de la cadena alimentaria y a los consumidores.