Julio es un mes estacionalmente caracterizado por aumentos de la afiliación y descensos del paro registrado, por lo que a priori se suele esperar un buen comportamiento del mercado laboral, como así ha sido. Los datos publicados han confirmado las expectativas. La afiliación ha registrado el segundo mayor aumento en dicho mes desde 2007. Además, aumenta de manera significativa en términos desestacionalizados. Los ERTE se han reducido en 116 mil personas durante el mes, aunque todavía afectan a 331 mil personas. El paro registrado, por su parte, ha experimentado en julio la mayor reducción en dicho mes de toda la serie histórica. Finalmente, la contratación ha crecido de manera intensa en términos interanuales.
La afiliación a la Seguridad Social en julio creció en 91.451 personas, un aumento de un 0,47%, el segundo mayor aumento registrado en dicho mes desde 2007. Debe tenerse en cuenta además que los afectados por ERTE, que se incluyen dentro del total de afiliados, han descendido en 116 mil durante julio, hasta las 331 mil personas. La serie desestacionalizada de afiliados refleja un aumento notable de la afiliación en julio y la variación interanual se desacelera, con un 4,29%. La cifra total de afiliados se sitúa en 19,59 millones de personas.
La contratación creció un 2,24% respecto a junio, con un total de 1,84 millones de contratos. En comparación con el mes anterior, el aumento de la contratación se ha producido solo en la temporal (+2,93%), ya que ha caído indefinida (-4,26%). En términos interanuales, la contratación indefinida creció un 17,29% mientras que la temporal aumentó un 19,91% respecto a las cifras de julio de 2020.
El paro registrado descendió en julio en 197.841 personas (-5,47%), lo que supone el mayor descenso en un mes de julio en toda la serie histórica. En términos desestacionalizados el dato es positivo, puesto que refleja un descenso del paro registrado en julio. La cifra total de parados registrados queda situada en los 3,42 millones de personas.