La normativa, que recoge el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE), explica que algunos Estados miembros solicitaron antes del 31 de octubre de 2018 que se retuviera y se transfiriera al año siguiente una parte de sus cuotas. Precisa que en la transferencia de cuotas del 2018 al 2019 no se han incluido las de brótola de fango, como habían solicitado algunos países comunitarios.
La CE ha evitado en este reglamento que "un exceso de flexibilidad socavara el principio de explotación racional y responsable de los recursos biológicos marinos vivos, obstaculizara la consecución de los objetivos de la Política Pesquera Común y deteriorara el estado biológico de las poblaciones".
Para España, Bruselas ha dado luz verde a la transferencia de cuotas del 2018 para este año de alfonsinos, anchoa, rape, maruca azul, sable negro, fletán negro, eglefino, arenque, merluza, jurel, gallo, caballa, cigala, carbonero, granadero, besugo, lenguado europeo, bacaladilla y merlán.