Los alimentos y las bebidas no alcohólicas se encarecieron durante el mes de enero un 2 % respecto al precio que tenían hace justo un año y tres décimas más que el aumento observado en diciembre, una tendencia alcista impulsada por la expresiva subida del pescado y el marisco.
Así se desprende del Índice de Precios al Consumo (IPC) divulgado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que revela que la inflación en los alimentos casi duplicó la media general, que se situó en el 1,1 %.
A este incremento contribuyó especialmente la categoría del pescado y el marisco, en la que los precios se dispararon en enero un 8,2 %, así como la carne de porcino, que aumentó un 7,7 %. Por el contrario, el precio de los aceites y grasas se desplomó un 9,4 en comparación con el primer mes de 2019.
La inflación en el caso de las bebidas alcohólicas y el tabaco se situó en el 0,5 % en tasa interanual, una décima superior a la cifra de diciembre.
Por regiones, la mayores subidas en el capítulo de alimentos y bebidas no alcohólicas se registraron en País Vasco y La Rioja, con una subida del IPC del 2,9 %.
En el lado contrario se situaron Baleares y Melilla, con aumentos del 1,4 %, así como Ceuta y Aragón, con repuntes del 1,5 %.